SEGUNDA GRAN NOCHE DE BENDICIONES "SANADOS PARA SERVIR"

“Vivimos momentos difíciles en Santa Marta, por ello necesitamos encontrar paz interior a través del amor de Dios”.

Las Noches de Bendiciones son jornadas de evangelización que se realizan en las diferentes parroquias de la ciudad, coordinadas por la emisora Voces 89.4 f.m. y el oracional Cristo en Medio; estas actividades incluyen momentos de alabanza, adoración al santísimo y la predicación del Padre Jesús Orozco Pabón. Teniendo en cuenta la aceptación de estas jornadas en cada una de las parroquias visitadas durante el año 2014, para el día 5 de septiembre del 2014 se programó una “Gran Noche de Bendiciones” que tuvo como predicador central al Padre Charly García; y con su predicación Amor, Sanidad y Prosperidad cautivó a  las más de 2.000 personas que se congregaron esa noche en el Coliseo Mayor. 

La segunda jornada de la Gran Noche de Bendiciones tuvo como lema “Sanados Para Servir”, y se llevó a cabo el día 25 de septiembre desde las 6:30 de la tarde la parroquia Señor de los Milagros; ubicada en el Rodadero sur. Todos los fieles católicos que asistieron desde las 6:30 de la tarde dispusieron el corazón para Dios y se abrieron a su gracia, amor y misericordia. En esta ocasión el predicador central fue el padre Diego Jaramillo, la eucaristía estuvo presidida por Monseñor Luis Adriano Piedrahita y el ministerio musical que nos acompañó fue el grupo Ixthys. 

Es muy importante destacar de que el padre Diego Jaramillo sacerdote eudista es actualmente presidente de la  Corporación Minuto de Dios, quien a sus 81 años con devoción y regularidad presenta en los canales de televisión nacional el programas más antiguo de la televisión colombiana “El Minuto de Dios”, al aire ininterrumpidamente desde el año 1955. 

El evento “Sanados Para Servir” llenó las expectativas. Muchas personas asistentes a las anteriores jornadas de evangelización se acercaron a contar sus testimonios y afirman que al llegar allí se sentían, angustiadas, tristes, deprimidas, tal vez preocupadas, dudosas, desesperanzadas; pero al salir del evento daban gracias a Dios por las bendiciones recibidas.