En el norte de la ciudad está situado el barrio donde hacía aproximadamente 9 meses no se presentaba un homicidio, pero en la noche de ayer esta cifra fue modificada por atentado en contra de mototaxista.
Por: Gennys Álvarez
Las autoridades confirmaron el asesinato de Pedro Luis Carrillo Montenegro, quien fue ultimado con cinco impactos de bala sobre su humanidad. Este suceso tuvo lugar en el establecimiento comercial de razón social "Los Primos". Este hecho judicial interrumpe con el bienestar de los habitantes del barrio quienes no presenciaban un hecho como este hacía 9 meses.
Para la comunidad, el asesinato de Carrillo es motivo de preocupación debido a que al ser ausente los operativos de registro y control por parte de la Policía del CAI San Jorge, es fácil el ingreso y salida de cualquier arma en el sector. Marcos Teherán, presidente de la junta de acción comunal del barrio, asegura que los uniformados no son prontos a los requerimientos que los ciudadanos hacen y en el peor de los casos no se aparecen, evidencia de ello sería este asesinato.
"Es preocupante el problema de seguridad. Nosotros como junta hemos tratado de comunicarnos con el comandante del CAI San Jorge, el subteniente Harol Masías, y siempre lo quedamos esperando, lo llamo y le digo que tenemos que hablar con él y nunca aparece", esto dijo Teherán mostrando lo desprotegido que se sienten debido al ausentismo policial. El líder comunal cree que este hecho es un llamado de atención para el nombrado comandante de la Policía Metropolitana el coronel Gustavo Berdugo, para que le ponga la lupa a la operatividad de la institución en el barrio.
El asesinato ocurrido anoche se junta a otros actos delincuenciales que suceden como parte de lo cotidiano y Marcos le atañe esta situación a la falta de registros de los patrulleros que llegan al barrio y se pasean por él como pedros por su casa: "Ese es el tema, pasan y no le dan requisa a la gente, no piden documento, nada. Ellos pasan como por la puerta, adiós y listo", concluyó el vocero de la comunidad.
Este asesinato se convierte en un lunar negro en los avances que se veían presentando en el barrio. Los habitantes esperan que se le dé soluciones a la falta de presencia de unidades policiales que realicen su labor responsable de preservar el orden público y la seguridad ciudadana.
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