Los conductores de servicio público se quejan de la malla víal de la ruta Bonda - el Curval. La movilidad por estos caminos se ha convertido en un enemigo para los vehículos.
Por: Gennys Álvarez

"En estos momentos las vías están totalmente intransitables, hay huecos y hasta ramas tiradas en el camino. Por eso es que hay muchos choferes que no quieren subir hasta el Curval", dijo un miembro del gremio de buseteros que épicamente batallan por hacer la travesía por estas vías.
El mismo problema de la malla vial se presenta en la estación de buses de la Rosalía, donde por la falta de acceso por estos caminos, el despacho de buses tuvo que ser cambiado del lugar desde donde siempre ha funcionado, por el peligro que representa las rutas. El tiempo ha hecho que los huecos se conviertan en cráteres daña carros. Los conductores esperan la acción pronta de los entes del gobierno local y líderes de la comunidad para resolver la problemática.
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